Mathieu Lapierre, Julien Guillot, Jeff Coutelou... L'Ànima del Vi, bar de vinos naturales

Morgon 2013

Domaine M. Lapierre

Todos aquellos que amamos el vino y defendemos que se elabore de la forma más natural posible le debemos mucho a Marcel Lapierre, una de las figuras del Beaujolais y admirado por todo el mundo vinícola. En los ochenta fue uno de los pioneros en seguir las enseñanzas de su maestro Jules Chauvet (vigneron, químico y magnífico catador defensor del vino natural), retomando antiguas prácticas tradicionales de viticultura y vinificación, dando así importancia a las viejas cepas, no utilizando herbicidas o pesticidas, vendimiando en perfecto estado de maduración, seleccionando las uvas más sanas, empleando mínimas dosis de dióxido de azufre o nada en absoluto, utilizando las propias levaduras de la uva y rechazando la chaptalización y la filtración.

Hoy en día, Mathieu, su hijo, continúa el magnífico trabajo iniciado por su padre Marcel, fallecido en otoño del 2010. Trabajando juntos, adoptaron ya las prácticas propias del viñedo biodinámico. Degustar sus vinos es imprescindible para conocer la esencia de Beaujolais.

Mi afición a probar siempre distintos vinos me hace repetir pocas veces, no es mi caso con su Morgon, en su versión sin sulfitos añadidos. En la otra versión, también sin filtrar, se añade una pequeña dosis de sulfuroso para protegerlo frente a variaciones de temperatura. En ambos casos se informa en la contraetiqueta.

Ya hace algunos años que no me pierdo ninguna añada, la última que he bebido ha sido la 2013 (sans sulfites ajoutés). Es un vino con un perfume floral, frutillos rojos, cerezas, sin atisbos de su crianza durante un año en barricas usadas, y sobre todo vivo, fresco.

Si el 2013 se mostró así, volver a beber el 2012 un año y medio más tarde de cuando salió al mercado me confirmó una vez más sus virtudes y clase, violetas y cerezas en nariz, deliciosa boca. ¿Es posible que todavía me guste más el Morgon que elabora Mathieu que el que realizaba junto a su padre? No sé, pero lo que sí sé es que es un vino para beber todos los días.

Benoît adquiere siempre para L'Ànima del Vi (Barcelona) el último embotellado del año, en época de vendimia.

Cuvée 910 2013, Mâcon-Cruzille

Clos des Vignes du Maynes

Cuvée llamada 910 en homenaje al año de fundación de la Abadía de Cluny, cuyos monjes plantaron por primera vez sus viñas en estas tierras. De ahí también el nombre del clos, siendo al parecer Maynes un antiguo error de transcripción queriendo en realidad indicar moines (moynes en aquella época).

Desde los años 50 este viñedo se encuentra en manos de la familia Guillot. Son 6,6 hectáreas cultivadas desde 1998 bajo principios biodinámicos y en agricultura ecológica desde sus orígenes. Sus suelos arcillo-calcáreos presentan muestras de minerales como la aragonita (cristales de calcita) y filamentos de manganeso. Manganite y Aragonite son también los nombres de dos de sus mejores vinos. Julien Guillot es el actual propietario y elaborador, 3ª generación de vignerons de la familia.

En junio de 2010 se conmemoró en Cluny los 1.100 años de antigüedad de la Abadía. Clos des Vignes du Maynes realizó un vino especialmente para la ocasión, la Cuvée 910. Los toneles de vino fueron transportados en carros con bueyes, posteriormente se embotelló y degustó. Una fiesta del vino. La uva había sido vendimiada en septiembre de 2009 y fue prensada con los pies en otra fiesta de estilo medieval, ambientándose en todo momento en la época, el siglo X, incluida la vestimenta.

Embotellado (2010)

 Vendimia (2009)

Julien Guillot continúa elaborando esta cuvée. El 2013 que he disfrutado es un vino de poco color, rubí transparente, ligero, se perciben notas de pimienta, rosa, y fruta refrescante. Solo 11,8 de graduación alcohólica. Muy bebible, placentero y sabroso. Vinificado y envejecido sin adición de sulfuroso ni filtración. Ah, se me olvidaba, 60% gamay, 20% pinot noir y 20% chardonnay, vendimiadas al mismo tiempo, como los monjes lo hacían en aquellos tiempos.

Classe 2013, Vin de France

Jean-François Coutelou

Una de las últimas botellas que hemos abierto en el bar de vinos naturales de Núria y Benoît, es este vino de Jeff Coutelou. Syrah, carignan y grenache del Languedoc. Fruta generosa, fluidez y final ligeramente especiado. Se bebe rápidamente, fácilmente. Un vino para disfrutar compartiéndolo, entre amigos, comiendo y charlando. Así son los vinos de este vigneron. Entre los más conocidos: Le Vin des Amis, La Buvette à Paulette, 7 rue de la Pompe, La Vigne Haute...

Estos y varios más son los vinos y buenos momentos que hemos disfrutado en L'Ànima del Vi, uno de mis rincones preferidos de la ciudad, auténtico bar de vinos naturales.

Vicente

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